"Nuestro objetivo es desarrollar un material fuerte y ligero que cumpla con las necesidades de los vehículos, mientras se reduce el impacto medioambiental global." Los investigadores buscan desarrollar un plástico de origen 100% vegetal, que pueda ser empleado en todo el vehículo, desde la tela hasta el envasado y con un menor impacto ambiental que los materiales de embalaje a base de petróleo que se emplean actualmente."Aunque estamos en las primeras etapas de la investigación, y quedan muchas preguntas, estamos entusiasmados con las posibilidades que esto podría producir".
El compromiso de Ford para reducir, reutilizar y reciclar es parte de la estrategia global de la compañía para reducir su huella ambiental. En los últimos años, Ford ha aumentado el empleo de materiales no metálicos y de base biológica reciclados, como la celulosa fibra-reforzada empleada en componentes de la consola y capuchas de cáscara de arroz empleados en el sistema eléctrico, así como materiales compuestos logrados a partir de cocos, algodón reciclado para las alfombras y asientos de tela o los cojines y reposacabezas de espuma de soja.